Loteria Nacional
"Una institución que nació para ayudar a los más necesitados".
Fue la alternativa que concibió el educador y sacerdote Francisco Xavier Billini cuando le faltaron fondos económicos para costear las instituciones caritativas fundadas por él para socorrer a enfermos, ancianos y niños indigentes. Los antecedentes históricos de la Lotería Nacional se remontan al 24 de octubre de 1882, cuando el sacerdote dominicano puso en marcha el juego denominado “La Lotería del Padre Billini”, que consistía en billetes de cuatro números denominados “cuartitos”.
Desde el momento de su fundación, esta institución, conocida hoy como Lotería Nacional, fue guiada por reglamentos que buscaban orden, respeto y credibilidad. Primero, y por disposición de su creador, la entidad fue puesta bajo la administración de una “Junta de la Caridad”, compuesta por personas de reconocida honestidad. Eran trece miembros, designados por el propio Padre Billini, en testamento.
La primera Junta de la Caridad estuvo formada por Simón Flatow, José Pantaleón Soler, Antonio Geraldino, Juan Geraldino, Amelio Fernández, Francisco Sanabia, Martín Sanlley, José Ricardo Roques, José María Arredondo, Gabriel B. Carranfa, Jacinto de Castro, Dr. Pedro A. Delgado, José M. Díaz, Claudio Polanco e Hipólito Billini.
Ocho años más tarde, el 9 de marzo de 1890, el padre Francisco Xavier Billini murió; pero no así su obra. “La Lotería del Padre Billini” siguió funcionando bajo el amparo de la Junta de la Caridad. En los años siguientes, aunque el funcionamiento de la organización se vio amenazado varias veces por diferentes causas, pudo mantenerse y resurgir para continuar su obra caritativa. Bajo la dirección de Simón Flatow, la Junta de la Caridad formuló el primer instrumento legal de la institución. Se trata de la resolución 2958, del 10 de septiembre de 1890. Le llamaron “Compañía de Lotería de Santo Domingo”. Todavía la figura del administrador no existía, sino una junta directiva, que encabezaba Simón J. Flatow y tenía vigencia de dos años.
El primer instrumento legal de la Lotería fue firmado por el presidente Ulises Hereaux y divulgado a los 47 años de la Independencia y a los 28 de la Restauración.En el mismo año 1890, la Junta Directiva nombró como presidente de la Lotería, a Don Antonio Geraldino. Entonces, los sorteos de los billetes que circulaban subieron a 10 décimos y a una fracción de billete le llamaban un décimo, en vez de un cuartito.
Don Antonio Geraldino murió en 1910. Lo sustituyó su hijo Juan Geraldino., quien administró la Lotería desde 1910 hasta 1920. Durante su gestión, se subió el valor del premio mayor que pasó de RD$5,000.00 (año 1917) a RD$7,000.00. Geraldino renunció cuando en 1920, durante la invasión norteamericana, el jefe de la ocupación le informó que ellos (los americanos) administrarían la Lotería y él pasaría a dirigir las oficinas. El contralmirante de la armada de los Estados Unidos era Thomás Snowden.
Como, por ley, la Lotería no podía pasar a manos extranjeras, fue nombrado como presidente de la Junta Directiva Panchito Herrera.Hay que destacar también que el 5 de marzo del 1920, por orden ejecutiva número 420, del gobierno militar norteamericano, se suprimieron todas las loterías del país. Luego fueron creadas una en la capital y otra en el Cibao.
Considerando: Que las loterías en República Dominicana son necesarias por ahora para el sostenimiento de las instituciones y para el tratamiento y cuidado de los enfermos, los ancianos pobres, los dementes y los huérfanos. Considerando: Que las loterías que podrán ser autorizadas para celebrar sus sorteos en la República Dominicana deben ser regularizadas e inspeccionadas de modo eficiente.
Art. 1: En y después del primero de julio de 1920 se permitirán en la República Dominicana dos loterías solamente: una en la ciudad de Santo Domingo y otra en una ciudad del Cibao. Otra Orden Ejecutiva que hay que mencionar es la No. 492, del 15 de junio de 1920, en la que se indica que el “Gobierno se encargará de operar las loterías. Así le fue retirada la autoridad a los administradores para dirigir las loterías. El Poder Ejecutivo nombró un receptor de las loterías. El nuevo administrador fue Don Panchito Herrera, que tres años después fue sustituido por Agapito del Toro y este por Rafael Rovira.
El siguiente administrador fue Antonio Hoepelman, en 1927. En este año, específicamente el 26 de junio, se emitió la Ley 689, que crea la Lotería Nacional, al establecer “una renta pública bajo la denominación de Lotería Nacional, que significa e incluye cualquier sistema usado en la República Dominicana con el fin de disponer o distribuir dinero u otros objetos de valor, como resultado de un sorteo público.
Estos sorteos serían efectuados por la Administración de la misma en la ciudad de Santo Domingo con el apoyo de las Colecturías de Rentas Internas en las cabeceras de las provincias”. En los anales de esta institución hay que subrayar el decreto No. 890, del 30 de mayo de 1955, que traspasa la Lotería Nacional a la Secretaría de Estado de Finanzas, bajo cuya dependencia aún funciona.